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Patologías
Por el Dr. Jorge Manresa
La infección de las vías urinarias, padecimiento bastante común entre los niños, implica el crecimiento de gérmenes en las vías urinarias que habitualmente están estériles. En este artículo vamos a conocer más sobre las cistitis infantiles, sus posibles repercusiones y como puede ayudar la homeopatía en su tratamiento.
Es importante saber antes que nada la diferencia entre cistitis y pielonefritis. Cuando la infección afecta al tejido del riñón, hablamos de pielonefritis aguda, infecciones que afectan al tracto urinario superior produciendo inflamación y con frecuencia fiebre, Cuando no lo hace, hablamos de infección de las vías urinarias bajas o cistitis.
La cistitis en los niños es un padecimiento bastante común, siendo una de las infecciones bacterianas más frecuentes en pediatría. Entre un 8 y un 10 % de las niñas y un 2 a un 3% de los niños tendrá una infección urinaria sintomática antes de los 7 años. Aunque hay un claro predominio de la frecuencia en las niñas, los 3 primeros meses de vida es más frecuente en los niños.
En las niñas, hasta un 30 % repiten las infecciones por gérmenes distintos al de la primera infección, sobre todo durante el primer año de vida.
¿Por qué se produce la cistitis en los niños?
No existe una razón general por la que algunos niños desarrollan episodios de cistitis y otros no. Si es cierto que algunos son más susceptibles a padecerla y que hay algunos motivos que pueden favorecerlas, tales como:
- Cuando el pañal está lleno de heces y las bacterias fecales entran en contacto con la uretra.
- Estreñimiento pertinaz.
- Escasa higiene genital sobre todo en las niñas.
- En las niñas, limpiar la zona anal de atrás adelante tras defecar.
- Contener el pis.
- Fimosis.
- Prematuridad.
- Diabetes.
En la gran mayoría de los casos, la cistitis en los niños está causada por bacterias, generalmente del tubo digestivo que se introducen en la vejiga a través de la uretra, el conducto por el que sale la orina.
En un 80-90% de los casos en todos los grupos de edad, estas infecciones están producidas por la bacteria Escherichia coli. También otras bacterias de origen intestinal tales como Klebsiella, Proteus mirabilis o Pseudomona aeruginosa, pueden producir infección de orina aunque con mucha menos frecuencia.
Los hongos como causa son muy poco frecuentes y afectan a niños como una inmunidad deprimida o bien suprimida por tratamientos por otros motivos.
Los virus tales como los adenovirus rara vez provocan infecciones urinarias, y cuando lo hacen, suele tratarse de cistitis hemorrágica también en niños inmunodeficientes.
Detrás de las infecciones urinarias en los niños más pequeños suele haber anomalías o malformaciones anatómicas que facilitan su aparición, tales como obstrucciones al flujo de la orina, vejiga neurógena o el reflujo vesicoureteral en el que la orina vuelve de la vejiga al uréter y a los riñones por mal funcionamiento de las válvulas del uréter.
Síntomas de la cistitis en los niños
Mientras que los síntomas de las infecciones de orina en general y la cistitis en particular suelen ser muy evidentes en la edad adulta, en la infancia al igual que en la vejez pueden muy anodinos y confundir el diagnóstico.
Las infecciones urinarias pueden comprometer los riñones, la vejiga o ambos.
Veamos de modo general los posibles síntomas según la edad:
RECIEN NACIDOS. Los signos y síntomas suelen ser inespecíficos, en forma de falta de apetito, diarrea y/o vómitos, ictericia leve (color amarillo de la piel) falta de energía, fiebre o hipotermia, irritabilidad. A esta edad, una infección de orina puede causar una sepsis (infección generalizada).
LACTANTES Y NIÑOS MENORES DE 2 AÑOS. Fiebre, vómitos, diarrea, dolor abdominal, mal olor de la orina.
NIÑOS MAYORES DE 2 AÑOS. Dolor/escozor en la zona de la vejiga y/o tras hacerlo, sangre en la orina, micciones frecuentes y escasas, incontinencia, sangre en la orina, mal olor o turbidez de la orina. En el caso de infección más alta (pielonefritis), no suele faltar la fiebre y el dolor a nivel dorsolumbar en la espalda.
Diagnóstico de la cistitis en los niños
En la práctica el diagnóstico de la infección de orina en Atención Primaria, se realiza en general por medio de una tira reactiva en contacto con una muestra de orina reciente y cuyos resultados orientan el diagnóstico. En ocasiones, se aprovecha la muestra previamente a instaurar el tratamiento, para solicitar un cultivo con el fin de identificar el germen implicado y el antibiótico más conveniente.
Tratamiento convencional de la cistitis en los niños
El tratamiento de la cistitis o pielonefritis es antibiótico, bien por vía oral en el caso de la cistitis y las pielonefritis leves, o bien intravenoso en caso de gravedad, pielonefritis complicada o resistencia al tratamiento antibiótico oral.
El antibiótico se elige entre aquellos que se eliminan fundamentalmente por la orina y con acción sobre las bacterias implicadas o de manera más específica según los resultados del antibiograma cuando se realiza el cultivo de orina.
En cualquiera de los casos, se pretende no solo tratar la infección sino también y, sobre todo evitar que se extienda a los riñones o produzca una sepsis (infección generalizada), sobre todo cuanto más pequeño es el niño.
Cuando las cistitis o las pielonefritis tienden a repetirse y especialmente si hay una causa física causante, se indican pequeñas dosis diarias de antibiótico para mantener la orina estéril. En estas recaídas suele estar implicada la misma bacteria que originó el primer episodio.
Tratamiento homeopático de la cistitis en los niños
Los medicamentos homeopáticos suelen ser muy eficaces junto con los antibióticos en el tratamiento de las cistitis infantiles no complicadas, a fin de obtener un alivio más rápido. Lo mismo ocurre en el adulto.
En el caso de las infecciones urinarias de repetición la homeopatía es una gran aliada en aquellos casos en que no existe una causa física que favorezca el reflujo o la retención de la orina.
Algunos de los medicamentos que utilizamos los médicos homeópatas para tratar las cistitis son:
CANTHARIS
MERCURIUS CORROSIVUS
ARSENICUM ALBUM
STAPHYSAGRIA
EQUISETUM
Para evitar la repetición de las infecciones, resulta muy útil la prescripción junto con alguno de los medicamentos anteriores de:
COLLIBACILINUM
SUERO ANTICOLIBACILAR
MEDORRHINUM
THUYA
SEPIA
SILICEA
La cistitis es una infección frecuente tanto en el adulto como en el niño. En ambos casos cuando tienden a repetirse y sobre todo en la infancia, requiere de una especial vigilancia para evitar que se produzcan lesiones crónicas en los riñones
Para saber más:
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