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Por Sofía Roca Bel, Naturópata jubilada. Amiga y Usuaria enamorada de La Homeopatía. Autora de los libros: La Esencia de las Flores de Bach y La Esencia de las Sales de Schussler.

El Museo de Homeopatía situado en el pueblo de la TORRE DE CLARAMUNT, en la provincia de Barcelona, ​​es el resultado de más de veinte y cinco años de coleccionar medicamentos, libros y objetos todos relacionados con la homeopatía.

Todo comenzó cuando, gracias a la Dra. María Lluïsa Queralt y a su arte homeopático me cambió la vida. Espero que desde donde esté pueda también ver la inauguración de este pequeño museo.

A partir de este momento, junto con el que era entonces mi marido, un arquitecto con el que compartía el amor por las antigüedades, iniciamos la búsqueda de todo lo que fuera referente a la homeopatía, por toda Cataluña, España, Francia, Inglaterra …… así, año tras año.

Fue en uno de los viajes que hice por Alemania del Este, recorriendo todos los pueblos donde había vivido y trabajado el Dr. Hahnemann: Meissen, Köthen, Leizpig, Dessau y Torgau, que, al ver los museos homeopáticos de estas localidades, pensé en todo lo que yo el material que tenía, y nació la idea de hacer en Barcelona un homenaje a la Homeopatía y su fundador creando un museo.

Hace relativamente poco me fui a vivir a la Torre de Claramunt, sobre la Farmacia del pueblo.  Creo que en la vida no hay casualidades.

Resulta que en esta farmacia la farmacéutica María Dolores Campaña, madre de la farmacéutica actual, practicó y difundió la homeopatía ya por los años ochenta.

Aún hay más, quedé sorprendida cuando visitando a Josep Maria de Febrer, propietario del castillo de la Torre de Claramunt, vi en su sala de estar la foto del Dr. Sanllehy, un antepasado suyo y gran médico homeópata que introdujo la homeopatía en Cataluña a mediados del siglo XIX y fue fundador y primer presidente de la Academia Medico Homeopática de Barcelona.

Pensé entonces que este era el lugar donde tenía que exponer mi legado homeopático, con todo mi amor y esperando poder ayudar a valorar y respetar la homeopatía y a su fundador.

El Dr. Hahnemann quiso inscribir en su tumba estas palabras, que para mí son muy importantes: “Los más inestimables tesoros del hombre son un conciencia irreprochable y una buena salud. El amor de Dios y el estudio de sí mismo da lo uno, la Homeopatía lo otro”

Traducción del original: Dra. Roxana Ratera Alonso. Médica homeópata. AMHB.

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