Los ojos de la Homeopatía

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Cuando te acercas por primera vez a la Homeopatía, y eso lo he verificado en mí mismo y cada día en los alumnos-compañeros a los que intento enseñar esta terapéutica, hay algo que a todos nos impacta: la nueva manera de mirar a nuestros pacientes. Es lo que me gusta llamar “Los ojos de la Homeopatía”.

La Homeopatía te obliga a correr el velo del diagnóstico y ver qué hay detrás de él, quién está detrás de él. Para nosotros, como médicos, es fundamental encontrar el diagnóstico de nuestro paciente, porque cuando decimos que una persona sufre un proceso determinado, en ese diagnóstico encerramos un montón de información común a todas las personas que tienen esa enfermedad.
Pero sabemos que detrás de esos elementos comunes está el genio de la individualidad, todos aquellos aspectos particulares en la forma que cada persona tiene de padecer y de mostrar su enfermedad.

Y es uniendo esos dos aspectos, el diagnóstico común y la forma particular de expresarlo que tiene cada paciente, cuando somos capaces de comprender el estado de la persona en toda su dimensión.
La Homeopatía es una terapéutica tan eficaz porque nos enseña a mirar en lo profundo de la enfermedad, en la globalidad del ser humano. Y entonces, comprendiendo así a nuestro paciente, sí que podremos desarrollar una estrategia de tratamiento que se adapte a su estado y al momento de su enfermedad.

Y usaremos medicamentos homeopáticos o no, de una manera o de otra, combinados con otras terapéuticas… pero lo importante es que estaremos mirando a nuestro paciente en toda su dimensión, con “los ojos de la Homeopatía”.