Escritos

En el verano de 2009 me quedé sin voz. Unos días antes me dolía la garganta y pensé que era un resfriado, no le di mayor importancia. Así, a la semana ya no me dolía la garganta pero no podía articular palabra. Así que lo primero fue acudir al centro de salud que me derivó al otorrinolaringólogo, cuya cita se pospuso dos semanas más tarde. Claro que yo no podía estar un mes sin saber que ocurría con mi voz  así que me fui a otro privado y éste me diagnosticó un nódulo en la cuerda vocal izquierda. La solución única era operar porque se podría malignizar con el tiempo, si eso se quedaba ahí, según él.

Pasadas dos semanas el otorrinolaringólogo del hospital, me diagnosticó exactamente lo mismo que el privado, y con el mismo procedimiento y la misma solución: operar o se podría malignizar. Yo le sugerí que consultaría a una homeópata (todo esto susurrando) y que me gustaría ir a una logopeda. Le propuse al Doctor que me diera un plazo para ver si yo a mi manera mejoraba el nódulo. Muy escéptico aceptó,  y me dijo que de camino podría también rezar…. me dio cita a los 3 meses para ver cómo iba evolucionando en nódulo.

Decidí ir yo, de manera privada, claro, a la médica  homeópata. A la semana de comenzar con homeopatía y logopedia podía hablar. Y a los 3 meses  cuando volví a consulta del otorrino, sorprendido me dijo que había tenido mucha suerte. El nódulo desapareció completamente. …. que eso le ocurría a 1 persona entre 1 millón.  Se alegró mucho de mi completa mejoría.