Homeopatía en el Tratamiento de la Neuralgia del Trigémino

En este post voy a intentar explicar qué es la neuralgia del trigémino, cuáles son sus causas y sus  síntomas, cómo se diagnostica y qué opciones de tratamiento tenemos centrándome, por supuesto, en los medicamentos homeopáticos que puedan estar indicados en este tipo de neuralgia facial.

¿Qué es la neuralgia del trigémino?

Neuralgia es un término médico que significa dolor de origen nervioso.

La neuralgia del trigémino es el tipo de dolor facial más frecuente y uno de los síndromes dolorosos más severos que los médicos solemos ver en nuestra práctica diaria.

Se calcula que viene a afectar a 4-13 de cada 100.000 habitantes. Tiene una mayor incidencia entre los mayores de 50 años y una frecuencia también mayor entre las mujeres frente a los hombres, en una proporción de 1,5 a 1.

La neuralgia del trigémino genera, en un alto porcentaje de pacientes, una importante disminución en su calidad de vida, llegando incluso a afectar en su capacidad laboral a cerca de un 35% de los pacientes afectados por esta neuralgía facial. En este contexto, es frecuente que muchos pacientes presenten cuadros de ansiedad y depresión relacionados con la cronicidad y la intensidad de su sufrimiento para los que los medicamentos homeopáticos pueden ser también de gran ayuda.

¿Cuál es la función del nervio trigémino?

El nervio trigémino, también conocido como el quinto par craneal o V par, es un nervio que sale de la base del cráneo a cada lado de la cara.

Se llama trigémino porque es un nervio que se divide en otros tres:

• El nervio oftálmico. Este, a su vez, también se divide en otras tres ramas (nasal, frontal y lagrimal) que se encargarán de dar sensibilidad al cuero cabelludo y la frente, el párpado superior, la córnea, la nariz, la mucosa nasal, los senos frontales y partes de las meninges.

• El nervio maxilar. Esta rama da sensibilidad al párpado inferior y la mejilla, al dorso y la punta de la nariz, al labio superior, los dientes superiores, la mucosa nasal, el paladar y el techo de la faringe y a los senos maxilares etmoidal y esfenoidal.

• El nervio mandibular. La sensibilidad del labio inferior, los dientes inferiores, las alas de la nariz y la barbilla y los dos tercios anteriores de la lengua estarán a cargo de esta rama del trigémino. También se ocupará de vehiculizar las sensaciones de dolor y temperatura de la boca.

Esta rama del trigémino es la única que posee fibras motoras que se encargarán de controlar, fundamentalmente, la función de músculos de la masticación como el músculo temporal y el masetero.

Como vemos, el nervio trigémino es un nervio de función mixta, sensitiva y motora, pero con un protagonismo claro del aspecto sensitivo, de ahí que su patología se manifieste en forma de dolor intenso con poca implicación funcional.

Síntomas de la neuralgia del trigémino.

El dolor en las zonas controladas por el nervio trigémino, esto es la mejilla, la mandíbula, los dientes, las encías, los labios, los ojos y la frente, es el elemento central esta dolencia. Puede afectar a ambos lados de la cara pero lo más frecuente es que sea unilateral.

La neuralgia del trigémino puede manifestarse con distintos patrones sintomáticos:

• Episodios de dolor agudo, como si fuera una descarga eléctrica, que pueden durar de unos segundos a varios minutos. Suele ocurrir que estas crisis de dolor se vayan haciendo cada vez más frecuentes e intensas con el tiempo.

• Las crisis de dolor pueden repetirse a lo largo del día y mantenerse así durante días, semanas o meses. El paciente puede pasar también temporadas sin episodios de dolor.

• La neuralgia también puede manifestarse como una sensación constante de dolor ( a veces los pacientes lo describen como un ardor) sobre el que se desencadenan las crisis paroxísticas características de la neuralgia.

• El dolor puede focalizarse en una zona concreta, por ejemplo en el ojo derecho, o extenderse por zonas más amplias de la cara.

Estos ataques de dolor pueden ser espontáneos pero es frecuente que los puedan desencadenar acciones comunes como hablar, masticar, beber, cepillarse los dientes, sonreír, llorar, tocarse la cara o también el contacto del agua o del viento en el rostro.

Causas de la neuralgia del trigémino.

Cuando una persona sufre un dolor en la características de este tipo es evidente que el nervio trigémino no está funcionando bien pero es frecuente que en muchas ocasiones no seamos capaces de encontrar cuál es la causa que desencadena ese dolor.

Dentro de las causas que solemos identificar como causantes del dolor, la aceptada como más frecuente es la compresión del nervio trigémino por algún vaso sanguíneo en su salida hacia la cara a la altura de la base del cráneo.

Otras posibles causas de esta neuralgia facial serían:

• Trastornos desmielinizantes como la esclerosis múltiple. La mielina es una vaina que cubre los nervios y que cuando falta puede ser el origen de “cortoircuitos” en la transmisión del impulso nervioso que causen este tipo de dolor. Un dato a tener en cuenta es que en los pacientes que sufren una neuralgia del trigémino a causa de una esclerosis múltiple la afectación bilateral del dolor es mucho más frecuente.

• Tumores de la zona que compriman el nervio.

• Malformaciones anatómicas que compriman al trigémino.

• Traumatismos faciales y craneales.

• Secuelas de un accidente cerebrovascular.

• Hay doctores que, en algunos pacientes, lo pueden llegar a relacionar incluso con procesos propios del envejecimiento.

Diagnostico de la neuralgia del trigémino.

El diagnóstico es fundamentalmente clínico y se basa en la descripción de la sintomatología que nos refiere el paciente:

• Dolor de tipo paroxístico; repentino, lancinante y más o menos breve. El paciente puede referirlo como una “descarga eléctrica”.

• La zona, o zonas, de la cara a la que afecta el dolor va a confirmar que se trata de una afectación del nervio trigémino.

• La presencia de los desencadenantes del dolor a los que nos referíamos anteriormente.

Con el objetivo de determinar cuál puede ser el origen de la neuralgia se podrán pedir exploraciones y pruebas complementarias como una resonancia magnética.

Tratamiento convencional de la neuralgia del trigémino.

Si la neuralgia del trigémino que sufre la persona es secundaria a alguna dolencia o situación tratable, por supuesto, será fundamental el abordaje de esa patología.

En la mayoría de los casos el tratamiento se centrará en controlar el dolor con medicamentos del tipo de los anticonvulsivantes  y los espamolíticos. Pero con el paso del tiempo algunos pacientes dejan de sentir alivio con estos medicamentos, incluso cuando se usan combinados, o empiezan a sufrir efectos secundarios como mareos, desorientación, somnolencia y náuseas, muy limitantes para el desarrollo de una vida normal. En estas situaciones las inyecciones de botox o la cirugía son alternativas a considerar.

Homeopatía en el tratamiento de la neuralgia del trigémino.

La neuralgia del trigémino es una patología con una clara tendencia a cronificarse en el tiempo, siendo las crisis cada vez más intensas y frecuentes. Y al ser un dolor de tipo neurálgico su tratamiento convencional en difícil y con importantes riesgos de sufrir efectos secundarios no deseados en los pacientes a causa del uso a largo plazo de los medicamentos habituales.

Por ello es muy importante ser capaces de sumar opciones de tratamiento, seguras y libres de esos potenciales efectos secundarios, que ayuden a los pacientes. En este sentido, en homeopatía contamos con medicamentos indicados en este tipo de dolores que podremos utilizar solos o combinados con cualquier otro tipo de medicamentos o estrategias terapéuticas. Por ejemplo, en mi experiencia, la acupuntura y la osteopatía pueden ser también grandes aliados en el tratamiento de estos pacientes.

Además es muy importante señalar que estos medicamentos homeopáticos podremos usarlos en mujeres embarazadas, en pacientes polimedicados y en personas con problemas hepáticos o renales que desaconsejarían el uso de otro tipo de medicamentos.

Vamos a ver algunos de los medicamentos homeopáticos que podremos utilizar en estos pacientes teniendo en cuenta que, como veréis y como siempre insistimos, en el abordaje homeopático es muy importante conocer cómo se está manifestando el dolor en cada paciente para poder indicar el tratamiento más adecuado a cada caso. Usaremos así uno o varios medicamentos según las características de la sintomatología de cada persona.

Aconitum

El paciente sufre dolores insoportables de aparición brusca que lo agitan y lo angustian sobremanera. Es frecuente que se desencadenen con el frío seco (exposición al viento frío) y que se agraven por la noche. El dolor mejora al aire libre.

Arsenicum album

El dolor es ardiente pero, aun así, mejora con el calor en todas sus formas. El paciente puede sentirse muy asustado por su situación de salud y los dolores también tienden a agravarse por la noche.

Actea racemosa

El paciente siente dolores espamódicos muy intensos acompañados con una sensación como de “nube”, de atontamiento, en la cabeza. En el caso de las mujeres, se agravará durante la menstruación y los dolores serán más intensos cuanto más abundante sea la regla.

Belladonna

El dolor se acompañará de espasmos en la musculatura de la cara, dilatación de las pupilas e intensa sensibilidad a la luz (fotofobia).

Bryonia alba

El dolor de estos pacientes se agravará ante el más mínimo movimiento y solo encontrarán alivio en reposo absoluto. La presión fuerte y el calor local también les ayudará a mejorar sus síntomas.

Cedron

Es un medicamento homeopático muy interesante en pacientes que tienen las crisis de dolor de forma periódica y en días y horas fijos.

Colocynthis

Dolores calambroideos que pueden acompañarse de escalofríos. Mejoran con el reposo, el calor y la presión fuerte. Es muy característico que las crisis se desencadenen tras un enfado o una discusión que la persona no ha podido gestionar adecuadamente.

Iris versicolor

Indicado en el dolor suborbital bilateral.

Kalmia

El paciente refiere un dolor como de descarga eléctrica que puede ir acompañado de una sensación de picor en la lengua y en los dientes.

Magnesia phosphorica

Dolores espasmódicos que mejoran con calor y la presión y que tienden a localizarse sobre los ojos con irradiación hacia cara y cuello.

Rhododendron

Los dolores suelen localizarse en el maxilar e irradiar hacia las sienes pero lo más importante para pensar en este medicamento, independientemente de la localización del dolor, es que la neuralgia se agrave o se desencadene con las tormentas. También suelen ser pacientes muy sensibles al frío húmedo.

Rhus toxicodendron

El dolor, a diferencia de lo que les ocurre a los pacientes que necesitan Bryonia, mejora con el movimiento suave y mantenido. Y, como les pasaba a los pacientes de Rhododrendon, serán también extremadamente sensibles al frío húmedo que les agrava.

Spigelia

La neuralgia es sobre todo en la zona suborbital izquierda. Son dolores violentos, punzantes y ardientes y el paciente se muestra muy agitado y ansioso. La piel de la zona puede estar abotargada y dolorida.

Estos son algunos de los medicamentos homeopáticos con los que podemos contar a la hora de ayudar en el tratamiento de estas neuralgias faciales. El uso de uno u otro, o la combinación de varios de ellos, así como la dilución y la frecuencia con la que se indiquen, se decidirán, insisto, valorando cada caso individualmente.

#HomeopatíaSuma

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