Dra. Marian San José Olabarría. Médico Homeópata

En tiempo en que la Medicina Homeopática es cuestionada por voces que sin duda desconocen su virtud curativa a través del Principio de Similitud,   es mi deseo “sumar” mi experiencia particular con la Medicina Homeopática en confirmación de que la Homeopatía Suma.  

Experiencia que desarrollo en dos fases bien diferenciadas: como paciente y después en mi actividad médica.

En mi recorrido vital desde mi infancia, aun disfrutando de muy buena salud, sufría episodios hemorrágicos muy intensos y puntuales que dieron lugar al diagnóstico de Enfermedad de Von Willebrand, como bien conocemos, alteración de la coagulación asociada a una causa genética.

Transcurrí mi infancia, mi adolescencia y mi juventud con salud abundante y sin embargo también con episodios hemorrágicos que estaban vinculados a momentos de crisis en mi trayectoria vital y que pusieron en riesgo mi vida en algunas de las ocasiones. Hemorragias que por su intensidad y duración exigieron terapias con coagulantes, crioprecipitados y diferentes opciones farmacológicas según se investigaban actualizaciones terapéuticas.

Los episodios me afectaban progresivamente en órganos más profundos y las terapias me provocaban efectos secundarios cada vez más arriesgados.

Llegada a mi edad adulta, un nuevo proceso hemorrágico irrumpió llevándome ante la única opción terapéutica posible dado que no había respuesta consistente a otros tratamientos y las hemorragias eran cada vez más severas: cirugía.

Antes esta única opción y evaluando las consecuencias que significaba en mi vida además de las consecuencias que ya afrontaba por los tratamientos en episodios anteriores, tomé la decisión de encontrar la Medicina acorde a mi evolución.

Y como fue dicho: Quien busca halla y a quien llama se le abre. Por ir más allá de lo conocido, encontré un médico homeópata a quien consulté la posibilidad de lograr mi curación a través de la Medicina Homeopática.  Carles Amengual, excelente médico homeópata, estudió mi caso y realizó la prescripción del medicamento homeopático manteniendo la comunicación necesaria para detectar cualquier signo de gravedad que pudiera presentarse.

Al tercer día de iniciar la toma del medicamento Lachesis Mutus, experimenté una clara disminución de la pérdida de sangre y progresivamente, en dos semanas el proceso había concluido sin complicaciones.

Sorprendentemente, experimentaba en mí un estado de bienestar, de fuerza y vitalidad que muchos meses que ya no disfrutaba.  Aun cuando aún tenía una considerable anemia, me encontraba fuerte y emocionalmente serena.

Y más sorprendente aún, tenía muchos sueños cada noche que me producían un estado de profunda comunicación con la esencia de la vida, con las decisiones vitales que me correspondía afrontar.

Sorprendida y profundamente agradecida, me interrogaba cómo era posible que en tantos años de formación en la universidad no hubiera tenido noticia de una Medicina tan maravillosa. Habiendo nacido en Bilbao, desde mi infancia viajaba con frecuencia con mi familia a Biarritz, en Francia, y recordada que había visto en las farmacias la palabra Homeopathie y me había llamado la atención. Me entusiasmé leyendo la biografía de Samuel C. Hahnemann, sus Escritos… tratando de comprender su Método que tanto bien me propiciaba.

Continué según prescripción el tratamiento con Ferrum Phosphoricum y posteriormente con Phosphorus. Llegando a un estado ampliamente saludable que me permitió realizar a los cuatro meses un viaje a los Alpes suizos realizando caminatas por sus hermosas montañas y en mi particular homenaje de gratitud a Samuel Hahnemann, recorrer  los lugares  en los que vivió en Alemania, la ciudad en que nació,  la ciudad en que ejerció su actividad médica,  su consultorio de Medicina Homeopática…

Al regreso del Viaje, gracias también al impulso del Dr. Amengual, tomé mi decisión de estudiar el máster de Medicina Homeopática en la Universitat de Barcelona y ofrecer así a mis pacientes la Medicina en que encontré y encuentro la eficaz coherencia con la evolución del ser humano.  Realicé además diferentes cursos monográficos impartidos por la Academia de Medicina Homeopática de Barcelona,  por la Académie Genevoise d’Homeopathie,  por el Grupo de Docencia e Investigación de la Escuela Libre de Homeopatía de México. Formación que me ha permitido ofrecer a mis pacientes la oportunidad de tratarse con Medicina Homeopática.

Vengo realizando desde entonces mi actividad médica en Medicina Homeopática. Los pacientes de todas las edades aprovechan y agradecen día a día por los resultados que logran en prevención y en la curación de enfermedades o en la mejoría de su estado de Salud. Mi padre y mi madre que tienen 92 y 88 años de edad respectivamente se han beneficiado y se benefician de la Medicina Homeopática sin que hay sido necesario aplicar protocolos preventivos que habitualmente se usan en personas a partir de los 65 años.

Particularmente significativa es para mí la propuesta de Hahnemann respecto a la toma del caso a través de la Escucha atenta, libre de prejuicios.

En mi experiencia médica,  escucho en las palabras del paciente lo que dice, no sólo lo que cree decir y lo que a partir de esta Escucha surge, me permite encontrar el medicamento homeopático conveniente al individuo, considerando lo digno de ser curado  y   le proporciona  a la persona una apertura por la que tomar su propio camino hacia su Salud, llegando a conclusiones concretas y eficaces respecto a una toma de posición en todas las áreas de su vida. Es una oportunidad magnífica de realizar una alianza médico paciente que respeta y estimula responsablemente la autonomía de ambos.

Resumen Formación:

• Licenciada en Medicina y Cirugía. Universidad de Alcalá de Henares. Madrid

• Master en Medicina Homeopática. IL3 Universitat de Barcelona

• Master en Medicina Tradicional China, Acupuntura y Moxibustión. Universidad Pablo Olavide de Sevilla Estudios de Medicina Tibetana. IAMTT

Si te ha gustado ¡compártelo!