Sobre Homeopatía
¿Qué es la homeopatía?
A vista de pájaro. Una visión rápida y panorámica de la homeopatía
La homeopatía es una terapia no convencional, reconocida como tal por la legislación española.
Es un tratamiento natural en la medida que contribuye a la salud del paciente de forma respetuosa con el organismo. Potencia la capacidad del cuerpo para recuperar su equilibrio e impulsa sus recursos de autorregulación.
La homeopatía suma una opción adicional, que los profesionales sanitarios pueden emplear para restablecer la salud de sus pacientes. Permite abordar al paciente desde una visión global (holística) que tiene en cuenta aspectos físicos, ambientales y emocionales.
Utiliza medicamentos homeopáticos, ofreciendo las garantías de calidad propias de un medicamento.
Además
Son los medicamentos más seguros de la farmacia porque se toleran muy bien. No se han descrito efectos secundarios relevantes y no interfieren con otros medicamentos.
Siempre bajo la supervisión de su médico y/o farmacéutico, los medicamentos homeopáticos están especialmente indicados para mujeres embarazadas, niños, pacientes polimedicados y crónicos, entre otros.
Un médico especialista en homeopatía adapta la elección del tratamiento a cada paciente según sus síntomas específicos y el resto de problemas de salud. Por eso, la homeopatía es un tratamiento personalizado.
Porque la Homeopatía siempre suma
Cuenta con las garantías de calidad de los medicamentos y se venden exclusivamente en farmacias.
Por ejemplo: Son una opción adecuada para las personas que buscan productos naturales pero con el control y la calidad propia de un medicamento. Pregunta a tu farmacéutico por la homeopatía.
Respeta tu organismo y mejora su manera de funcionar.
Por ejemplo: Tu cuerpo sabe reparar una herida y tu mente sabe sobreponerse a un disgusto. A veces sólo hay que desbloquear esa capacidad o potenciarla.
Porque tu primera opción para abordar un problema de salud debería ser segura y eficaz.
Por ejemplo: No hacen falta ansiolíticos cuando estás nervioso por un problema de pareja o en el trabajo. Tampoco te hacen falta antibióticos ante una infección vírica. Siempre será más adecuado contar con todas las opciones posibles para optar por el tratamiento que más se ajuste a ti, para “no matar moscas a cañonazos”.
No interfiere con los fármacos que estás tomando: los medicamentos homeopáticos se complementan con ellos.
Por ejemplo: Seguro que te parece habitual utilizar un antibiótico junto con un antiinflamatorio. Y a menudo añadir también un protector gástrico o un probiótico. De igual manera, puedes acompañar tu tratamiento convencional con un tratamiento homeopático. Hazlo siempre bajo la supervisión de tu médico o farmacéutico.
Vas de especialista en especialista y cada uno sabe qué es lo mejor para esa parte de tu cuerpo, pero necesitas a alguien que vea el conjunto y sepa interpretarlo.
Por ejemplo: Padeces del estómago, de la piel, de los bronquios, de las articulaciones… todo a la vez. ¿Cómo es posible que aún abordemos la salud y el bienestar de nuestro propio cuerpo como si estuviera compuesto por partes independientes las unas de las otras? Hay una manera global y diferente de entender lo que te pasa y de ponerle solución.
Necesitas una nueva manera de tratarte para poder conseguir resultados nuevos, cuando lo que te han recomendado hasta ahora ya “no da más de sí”.
Por ejemplo: Llevas tiempo tomando antihistamínicos, analgésicos, ansiolíticos,… no estás del todo bien pero los fármacos habituales “han tocado techo”. Quizás sea el momento de ampliar tus posibilidades con los medicamentos homeopáticos.
Porque hasta los bebés, las mujeres embarazadas o los ancianos débiles pueden tomarla con tranquilidad.
Por ejemplo: Muchas veces una familia empieza usando la homeopatía por uno de sus miembros, y acaba usándola toda la familia al ver los resultados.
400 Mil profesionales y 400 millones de pacientes en todo el mundo no pueden estar equivocados.
En la farmacia
Los medicamentos homeopáticos pueden ayudarte con los problemas puntuales, ocasionales o temporales. La homeopatía es una opción interesante porque no interfiere con lo que estás tomando y no se han descrito efectos secundarios relevantes.
Si el tratamiento es correcto los resultados se producen en cuestión de horas.
Se recomienda frecuentemente para…
Gripe y Síntomas Gripales como Tos, Afonía o Dolor de Garganta.
Gastroenteritis
Dolores de cabeza
Contusiones
Síntomas de alergia
etc.
En la consulta del médico homeópata
Los medicamentos homeopáticos pueden ayudarte con problemas crónicos o complejos, o que no se han resuelto de otra manera, además de tratar los problemas puntuales que puedan ir apareciendo.
En estos casos los cambios pueden tardar apenas unas semanas en aparecer, lo que después de meses o años suele suponer una mejoría notable en la calidad de vida.
Los pacientes acuden con frecuencia por problemas como...
Alergia
Dermatitis y Verrugas
Asma
Afecciones reumáticas (artrosis, fibromialgia, espondilitis anquilosante, etc)
Ansiedad y Depresión
Migraña
Infecciones que se repiten (otitis, faringoamigdalitis, hongos vaginales, cistitis).
Efectos secundarios y calidad de vida en el cáncer (náuseas, llagas y quemaduras de la radioterapia, fatiga y anemia, dolores, aspectos emocionales, etc)
etc.
Según el tipo de paciente son más frecuentes unas consultas que otras, por ejemplo:
En los niños son frecuentes las consultas sobre:
Infecciones de repetición (faringitis, amigdalitis, vegetaciones, otitis)
Problemas de alimentación
Problemas de sueño
Alergias
En las mujeres son frecuentes las consultas sobre:
Problemas menstruales
Varices
Sofocos
Ayuda al parto
Infecciones genitales y urinarias de repetición
En los hombres son frecuentes las consultas sobre:
Problemas digestivos, colon irritable
Problemas urológicos, próstata, piedras
En enfermedades graves son frecuentes las consultas sobre:
Alivio de los efectos secundarios de los tratamientos antitumorales, nauseas, llagas y quemaduras de la radioterapia, anemia, defensas, dolores etc
Mejora de la calidad de vida en el cáncer, control del dolor de la fatiga, del sueño, de los aspectos emocionales
En definitiva la homeopatía constituye una opción terapéutica mas para la mejora de la salud de los pacientes ya sea como primera opción o complementándose con los tratamientos convencionales.
Una herramienta al servicio de profesionales sanitarios segura y eficaz que proporciona mayor bienestar al paciente
Los principios activos homeopáticos se consideran muy seguros: se toleran bien, apenas se han descrito reacciones adversas relevantes y no interfieren con la acción de otros medicamentos.
Sin embargo, eso no quiere decir que no sea conveniente estar atentos a ciertas precauciones para que tu médico o farmacéutico las tengan en cuenta y puedan ofrecerte el mejor tratamiento:
Algunos productos se ofrecen como “homeopáticos” sin serlo, en particular fuera de las farmacias. Recuerda que los verdaderos medicamentos homeopáticos son de dispensación exclusiva en farmacias.
Algunos principios activos, cuando se fabrican en las concentraciones más altas, no se recomiendan a los pacientes que sean alérgicos a esos principios activos (por ejemplo el Apis mellifica 5CH en el caso de la alergia a las abejas).
Los gránulos y glóbulos se fabrican con sacarosa y lactosa. No existe alergia como tal a estos componentes, pero quienes son intolerantes a ciertos azúcares pueden sufrir malestar tras tomar una dosis elevada (depende de cada paciente).
Algunas especialidades comerciales que se presentan en forma de comprimidos, jarabes, óvulos, etc. pueden contener excipientes a los que el paciente sea alérgico o intolerante (por ejemplo el estearato de magnesio).
Se ha descrito que en algunas ocasiones los síntomas pueden empeorar antes de comenzar la mejoría, lo cual manifiesta que el organismo ha empezado a poner en marcha sus reacciones de respuesta. Si estos síntomas no son llevaderos o duran más de 3 días, consulta con un médico homeópata.
Acude a un médico o farmacéutico formado en homeopatía para obtener el tratamiento más apropiado y completo, que se adecue a tu situación clínica y al resto de tratamientos que estás recibiendo.
Atención
Nunca abandones ni retrases los tratamientos que tu especialista considere necesarios para el correcto abordaje de tu enfermedad.
La consulta homeopática o el inicio de un tratamiento homeopático nunca debe suponer un retraso en el diagnóstico ni en la aplicación de los tratamientos convencionales que hayan demostrado científicamente poder mejorar el pronóstico o que formen parte de los protocolos de atención validados científicamente.
No abandones ni reduzcas la toma de los fármacos convencionales que formen parte de tu tratamiento habitual, salvo que tu médico te lo indique.
Siguiendo estas recomendaciones básicas, ayudarás a tu médico y farmacéutico a ofrecerte el mejor tratamiento con el mayor beneficio y el mínimo riesgo.
El 52,7% de los españoles considera que los medicamentos homeopáticos son efectivos según la VIII Encuesta de Percepción Social de la Ciencia 2016, realizada por la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (Fecyt). Conoce más cifras interesantes
La fabricación de los medicamentos homeopáticos sigue los mismos criterios de calidad que el resto de los fármacos. Conoce más sobre la legislación vigente.
En España los medicamentos homeopáticos se dispensan exclusivamente en farmacias desde 1994, cuando la legislación europea se traspuso a la española. Para saber más sobre la legislación
Más de 10.000 médicos hacen uso (ya sea regular u ocasionalmente) de los medicamentos homeopáticos, tanto en el sistema público como en las consultas privadas. Conoce más cifras interesantes
Se han publicado más de 2.000 experimentos de laboratorio, y la mayoría confirma los efectos biológicos específicos de los principios activos homeopáticos. Profundiza más sobre las Evidencias Científicas de la Homeopatía
La homeopatía nació en una publicación científica. Concretamente en una revista de farmacología y medicina en 1796. Aprende más sobre aspectos científicos
Existen sociedades científicas, tanto de médicos como de farmacéuticos y veterinarios, que se ocupan de apoyar la investigación, la formación y el correcto uso de la homeopatía. La Asamblea Nacional de Homeopatía (ANH) es la institución que representa a las más importantes. Quiénes somos
Los medicamentos están tan diluidos que no queda nada.
FALSO. Diferentes técnicas permiten detectar los principios activos en los medicamentos. Se trata de nanopartículas de materia prima y de estructuras estables en el excipiente. Se debe a que las diluciones seriadas se alternan con dinamizaciones, que son necesarias para producir esas modificaciones.
Se ha demostrado que no funciona más allá del efecto placebo.
FALSO. Funciona en situaciones en las que el placebo no existe, por ejemplo:
- Los estudios de laboratorio con células.
- Granjas y ganaderías.
- Cultivos agrícolas
- Tras un primer tratamiento erróneo, sin buenos resultados.
Los medicamentos homeopáticos solo contienen agua y azúcar.
FALSO. Además de agua y azúcar que se usan como excipientes, contienen los principios activos que aparecen en la etiqueta aprobada por la Agencia del Medicamento. Análisis físico-químicos específicos pueden detectan los principios activos y los estudios demuestran sus efectos, tanto en el laboratorio como con los pacientes.
Nadie sabe cómo funcionan.
FALSO. Los más de 2.400 estudios de laboratorio que se han publicado sirven precisamente para entender los medicamentos homeopáticos y cómo funcionan. A nivel general se demuestra que favorecen la resistencia a las agresiones y las respuestas de regulación o reparación. A nivel particular, se conoce el mecanismo de acción de numerosos medicamentos homeopáticos como Gelsemium, Arsenicum, Histaminum, Aspirina, Apis mellifica, etc. Algunos ejemplos son la estimulación de determinados receptores de las membranas de la célula, inhibición de enzimas con efectos específicos, cambios en la activación o desactivación de genes, etc.
No tiene efectos secundarios.
FALSO. Cualquier sustancia activa puede desencadenar efectos secundarios, incluyendo los medicamentos homeopáticos. La ventaja de los principios activos homeopáticos es que sus efectos secundarios son poco frecuentes, leves y transitorios. Además puede haber reacciones a los excipientes.
Los medicamentos homeopáticos pueden utilizarse en sustitución a las vacunas.
FALSO. Se deben administrar todas las vacunas que su médico considere apropiadas, según el calendario vacunal y las circunstancias específicas de cada persona. Los medicamentos homeopáticos pueden ejercer un papel protector que es interesante cuando no hay una vacuna para esa infección, cuando no es apropiada para un paciente en concreto o como complemento a la vacuna. Además, podría ayudar a resolver los síntomas derivados de la administración de algunas vacunas en algunos pacientes.
La homeopatía es lenta, tarda mucho tiempo en actuar.
FALSO. El efecto de la homeopatía es muy rápido. Los casos agudos, como una cefalea o una gastroenteritis, pueden aliviarse en cuestión de minutos u horas. En el caso de enfermedades crónicas o recidivantes, un médico experto en homeopatía puede conseguir que las migrañas o las crisis de colon irritable sean menos frecuentes e intensas, en tan solo unas semanas o meses.
La homeopatía cura el cáncer
FALSO. La homeopatía no cura el cáncer ni otras enfermedades similares. No hay evidencias científicas suficientes de que pueda hacerlo. Por tanto, nunca sustituyas un tratamiento convencional por otro complementario. En cambio, la homeopatía sí puede ser muy útil para mejorar la calidad de vida de los pacientes con cáncer. Por ejemplo, para ayudarles a tolerar mejor los tratamientos antitumorales, así como reducir el dolor, la ansiedad y la fatiga. Hay estudios que así lo demuestran. Para saber más sobre el papel complementario de la homeopatía en relación con el cáncer